Esta vez es distinto

Venezuela bien podría ser nombrado el país con mayor cantidad de marchas y protestas en un período que ya casi llega a los 20 años. Debido a lo anterior no faltan los venezolanos que entre los chats, reuniones familiares, sociales o las redes sociales comenten que ya están cansados de protestar, “siempre es lo mismo y nunca termina de pasar nada”.

 

“Cuentan conmigo para la marcha final, no me llamen sino vamos a ir a Miraflores a sacarlos”.

 

En estos momentos de protestas lo que la mayoría desea saber, dentro y fuera del país, es el desenlace, ¿será el mismo de otros momentos tensos en el país? ¿La situación actual es distinta a las anteriores?

 

La respuesta nos la dará como siempre el tiempo, pero pretendo compartir por qué considero que la situación actual es distinta a las anteriores.

 

El impacto de las redes sociales en las comunicaciones, a pesar de los canales y emisoras de radio que han sido cerradas, se ha logrado que:

 

1. Exista un alto número de personas participando.
2. Alto nivel de actividad espontánea.
3. Alto nivel de conectividad.

 

Estos tres puntos han existido en el pasado, pero actualmente son más aprovechados porque cada día más y más personas hacen uso de las redes sociales. La posibilidad de documentar y compartir en tiempo real la represión, no sólo por periodistas aguerridos sino por gente común, ha cambiado las reglas del juego.

 

Una persona con 130 seguidores puede enviar un mensaje que de replicarse en poco tiempo es compartido a 16,900 personas más. El famoso efecto avalancha de los videos o memes que se convierten en virales.

 

El que una persona haya logrado con un tweet, Leopoldo Castillo, que generó bastante controversia, que un preso político, Leopoldo López, luego de más de un mes de aislamiento haya podido ver a su familia, es un claro ejemplo.

 

El ambiente es volátil, incierto y complejo. Las predicciones a largo plazo son básicamente imposibles, en este momento la mejor fórmula de navegación es el instinto. Estamos en un momento histórico de decisiones complejas pero correctas. 

 

Ya la dictadura, proveedora del peor servicio posible, no es la que tiene el control, son los clientes, el pueblo en la calle. Esta lucha ha repercutido internacionalmente y ha sumado voluntades a la causa.

 

Estamos viviendo momentos en que se pone a prueba la capacidad de los venezolanos para lidiar con situaciones que son difíciles de controlar.

 

A medida que van pasando los días los ciudadanos son capaces de establecer mejores fórmulas para protegerse y enfrentar la represión en la calle. Van cambiando los paradigmas. 

 

Sino recuerdan la historia de David contra Goliat, les recomiendo el libro de MalcolGladwell. En resumidas cuentas, siempre se ha visto a David como el pequeño y débil adversario cuando realmente la historia, sumada a investigaciones, demuestran que el grande y torpe siempre fue Goliat. David era lo suficientemente ágil para saber que con un solo lanzamiento de piedra, que alcanzaría la misma velocidad de un disparo, acabaría con el gigante.

 

El gigante hubiera acabado con David en una pelea cuerpo a cuerpo, en su terreno, y se equivocó, hubo un cambio de paradigma que el gigante no esperaba y creo que tampoco hubiera entendido

 

La mejor recomendación para estos tiempos difíciles es ser capaces de tolerar y aceptar los cambios abruptos y la incertidumbre, entender que el enemigo es cada día más torpe, el pueblo ágil y definitivamente esta vez es distinto.

 

PD: Le debo parte del análisis a un curso de OPEN SAP tituladoExponential Growth

of Network Density Is Changing the Rules”.

 

Dashiell López

 

 

 

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