Juan Marco, sumando a mi visión de futuro

Se me solicitó ser padrino de Juan Marco... lo cual acepté.

Hay momentos en la vida en que las cosas no parecen salir tan bien, el país no puede estar peor, que tarde o temprano será mejor irse, buscar oportunidades en países donde se respeta el estado de derecho, que la batalla está perdida. A pesar de las cifras económicas que muestran un poder adquisitivo, que por país rentista, puede confundir e insiste en mantener cifras pasajeras.

Hace tres semanas escuché hablar de Viktor Frankl, que en 1945 escribió su famoso libro El hombre en busca de sentido, donde describe la vida del prisionero de un campo de concentración desde la perspectiva de un psiquiatra. En esta obra expone que, incluso en las condiciones más extremas de deshumanización y sufrimiento, el hombre debe encontrar una razón para vivir, basada en su dimensión espiritual.

Toda esta introducción para decir que mi esposa, mis futuros hijos, familia, amigos, tú y mi país lleno de libertades están en mi visión de futuro, son mi razón para vivir.

Pero Juan Marco vino a recordarme lo importante de imaginar ese país, ese futuro, de luchar para obtenerlo, sin importar lo dificil de las condiciones. Que gran responsabilidad, porque no sólo busco ese país de pluralidades para mí, sino para todos, y espero poder enseñarle eso.

Juan Marco no ha nacido y ya logra cosas, sumar a mi visión de futuro, de país, recordarme lo importante de tenerla siempre presente, de soñar en grande, sin límites, porque él se merece eso.

Encuentra a tu Juan Marco, a esa voz del futuro que visita tu presente para decirte: "pronto estaré con ustedes, por cierto, cómo es eso por allá, ¿vale la pena?".

Dashiell López