El Coche de Giver

Coche es una isla de Venezuela, que se encuentra al sur del Estado Nueva Esparta. Tiene 11 kilómetros de longitud y 6 de ancho, con aproximadamente 10.000 habitantes.

Desde Playa el Yaque, en Nueva Esparta, se puede ir en barco, en tan solo 30 minutos, existe también la opción de llevar el carro en un ferry. La isla además cuenta con un pequeño aeropuerto.

Es un lugar de pesca, turismo, windsurf y kitesurf.

Llegar a visitar cualquier lugar en el que se ha pagado un plan todo incluido, necesita de las ganas de aventurarnos más allá de las instalaciones del hotel, conocer su gente, el resto del lugar, su cultura.

Es allí donde, al descubrir la distancia entre el bar y la playa, decidimos salir a comprar una cava, después de ver a una persona felíz llenando la suya de hielo y cervezas.

El taxi que encontramos y su conductor, Giver, lograrían satisfacer muchas interrogantes sobre el lugar. Recorrer las calles de Coche en su coche, sus playas, historias y aprovechar la oportunidad para preguntar cualquier cosa, y todo lo anterior al ritmo de la música de Diómedes Díaz:
"...la mujer cuando quiere al hombre lo espera con baby doll.."

No podía creer que luego de visitar en 5 ocasiones la isla de Margarita (Estado Nueva Esparta), había dejado de conocer a Coche. Recordé que he ido 2 veces a las maravillosas playas de República Dominicana y me he quedado siempre dentro del hotel.

Giver no sólo nos llevó a comprar la cava en un supermercado chino, además nos dio un paseo al día siguiente por la salina, playa El Amor, bahía El Saco, las camaroneras y el cementerio de conchas.

Le agradezco a él por ser tan auténtico, autóctono, por compartir su paraiso con nosotros, darnos el mejor precio y servicio. Nuestras esposas te perdonan el alto volumen de tus 6 cornetas traseras, que aun estando con 1 rayita de volumen se hacían escuchar en toda la isla, la tardanza para llevarnos al restaurant y nunca
buscarnos.

Al hotel no le perdonamos que no hayan vuelto a poner papitas fritas en el almuerzo, el clavo salido que me llevé con la planta de mi pie, el horario del desayuno mal escrito, las 3 veces que fuimos a buscar las toallas de la playa y encontramos la misma respuesta: "vuelvan en 20 minutos..."

Me quedo nuevamente encantado con lo que esconde mi país en cada rincón, reconozco que falta mucho por hacer, pero ahora las ganas por los cambios empiezan a sobrar, para ofrecer mejores servicios y planes, mejor atención a los clientes, mantener la magia de lo que somos, de todo eso que nos hace diferentes y tan especiales a la vez.

Para Giver, su coche y nuestro Coche.

Dashiell López