Esa cédula es una tarjeta

Que nadie se confunda, la fulana "cédula del buen vivir" es una tarjeta de crédito.

Para explicar mejor, vamos a señalar las características de una tarjeta de crédito:
1.- Plástico que representa dinero y con el que podemos obtener cualquier cosa, siempre que el límite de crédito lo permita.
2.- Instrumento que permite hacer compras con dinero, que no necesariamente tenemos y, que hay que comprometerse a pagar con intereses.
3.- Trampa en la que caen muchas personas, al no entender el verdadero uso de una tarjeta, que terminan gastando más de lo que tienen.

¿Qué es una cédula? Es un documento que identifica a un ciudadano, bajo los criterios establecidos por su país.

¿Para qué sirve la cédula del buen vivir?

Para hacer compras en ciertos lugares, de algunos productos que se puedan encontrar allí y con un financiamiento a largo plazo. Financiamiento a largo plazo que igual hay que pagar. Es decir, compra hoy, de forma limitada, algo que tendrás que pagar en el futuro.

Si te lo financias es por dos razones:
(1) para no cargar tanto efectivo encima todo el tiempo, o
(2) porque no tienes otra forma de pagarlo.

Si la opción es la segunda, entonces no hay tampoco garantía de que lo puedas pagar en el futuro. Si el capitalismo ha sido criticado por los países comunistas o socialistas, es por la forma en que las personas tienden a tener una capacidad de consumo muy grande con los terribles efectos del endeudamiento.

Quiere decir lo anterior que el gobierno del Socialismo del Siglo XXI, Venezuela, está interesado en que sus ciudadanos con necesidades económicas puedan tener un instrumento que les permita comprar, incentivar el consumo, entre otras cosas, de algunos alimentos hoy que no sabremos si puedan pagar mañana.

Esa será una tarjeta, "la tarjeta del buen vivir" en tus primeras compras, y cuidado si la del "mal vivir y consumismo" a futuro.

Creen que por imponer un nombre, que no tiene nada que ver con la realidad, ya las cosas se resuelven y se pueden obtener muchos votos en plena campaña electoral.

Esa tarjeta le costará al gobierno mucho dinero, dinero de todos los venezolanos, es el reconocimiento de la mala calidad de vida, de la falta de posibilidades de la mayoría de los venezolanos para adquirir productos de la cesta básica. Todo lo anterior explica, según mi opinión, que la tarjeta no es la verdadera solución del problema que enfrenta la economía de un país con una inflación anual tan alta.

La cédula es una tarjeta de crédito chimba.
Enviado desde mi dispositivo movil BlackBerry® de Digitel. Dashiell López

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